El Ministerio de Seguridad, a cargo de Marcelo Sain, en conjunto con Fiscalía y las Fuerzas Federales determinaron que el Centro de Educación Física de Venado Tuerto sea el lugar de alojamiento transitorio para los aprehendidos que violen las medidas de aislamiento social obligatorio. Los efectivos policiales llevan a los aprehendidos al gimnasio local para evitar el aglomeramiento en una comisaría, los retienen allí unas horas hasta que los fiscales los imputen y luego deben respetar la cuarentena obligatoria en sus domicilios particulares. En caso de que tengan causas previas o pedidos de captura son trasladados a la comisaría.
Desde que comenzó la cuarentena en Venado Tuerto hubo alrededor de 200 detenciones y más de 300 en todo el Departamento General López.