Horacio Soljan, responsable del equipo Maquin Parts Racing, habló del delicado presente que viven los equipos de competición
Más allá del cuidado de la salud por el Covid-19, que es fundamental, la parte económica se está sintiendo en el automovilismo y eso genera mucha preocupación en el presente y también de cara al futuro.
En la estructura que lidera Horacio Soljan, en la ciudad de Venado Tuerto, nada es igual desde que se declaró la cuarentena obligatoria por el Coronavirus. El taller debió cerrar sus puertas y recién ahora pudo volver.
En dialogo con el Diario Los Andes, Soljan comentó: “Tuvimos la fábrica y el equipo de competición totalmente cerrado. Recién esta semana recibimos el permiso de la provincia, ya que abastecemos a servicios, para poder abrir. En la parte del TC los trabajos son mínimos ya que desde lo económico se nos complicó y la gente necesita cobrar su sueldo entero. Como empresa con poca espalda siento que no tenemos más margen para movernos. Se agotaron los recursos. Nos endeudamos para pagar deudas y no tenemos más oxígeno. Todo debe reanudarse pronto”.
En cuanto al estado de los autos y el de los motores, Soljan comentó: “Uno de los motores Torino ya está en el banco y el otro está listo para entrar en esa etapa. Donde estamos un poco más atrasado es con el Ford porque estamos trabajando en una nueva planta impulsora. Queremos tener dos para estar tranquilos y vamos a poner hincapié en el desarrollo ya que consideramos que nos está faltando un poco de potencia”.