El presidente Alberto Fernández, por medio de su jefe de gabinete, Santiago Cafiero, le pidió este viernes la renuncia al ministro de Salud de la Nación Ginés González García luego de que se supiera que desde esa cartera se facilitó a ciertas personas el acceso a la vacuna contra el coronavirus Covid-19 sin hacer caso de las prioridades dispuestas en la campaña de vacunación.
Se asegura además que al menos 10 personas habrían accedido a vacunarse de manera irregular en la sede del ministerio de Salud.
El escándalo estalló en las últimas horas cuando el periodista Horacio Verbitsky admitió que había logrado vacunarse gracias a la intervención del propio ministro.
El escándalo que generó la revelación de Verbitsky provocó indignación en la Casa Rosada en tiempos en que la Argentina negocia de manera denodada con Rusia y laboratorios de todo el mundo para garantizar el acceso a la vacuna en iguales condiciones a todos los argentinos siguiendo una clara estrategia de priorizar a aquellas personas que integran los grupos de riesgo o están en la primera línea de la batalla contra el coronavirus.
"Decidí vacunarme. Me puse a averiguar dónde hacerlo, llamé a mi viejo amigo Ginés González García, a quien conozco de mucho antes que fuera ministro, y me dijo que tenía que ir al Hospital Posadas", contó Verbitsky en su columna del Destape radio.
El periodista indicó: "El Hospital Posadas está en Palomar, creo que es partido de Morón, pero el barrio es Palomar y está ahí nomás de la villa Carlos Gardel. Y cuando estaba por ir recibí un mensaje del secretario de Ginés, que me dijo que iba a venir un equipo de vacunadores del Posadas al Ministerio y que fuera a darme la vacuna".
Verbitsky contó que se vacunó el jueves, que no tuvo ninguna reacción adversa y que el próximo 12 de marzo se aplicará la segunda dosis.
En tanto en la provincia de Buenos Aires comenzó esta semana la vacunación de los mayores de 70 y en la Ciudad se empezará a inmunizar a ese grupo poblacional a partir de la próxima semana. En ambos distritos, el adulto mayor debe anotarse en una lista y esperar a que le asignen un turno para recibir la vacuna contra el coronavirus, algo que Verbitsky no tuvo que hacer.