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Un hombre mostró las marcas de pasto chamuscado que aparecieron alrededor de su casa en Monte Buey, Córdoba, y contó que hace semanas que lo sigue una luz.
Un chacarero de Monte Buey, una localidad del departamento de Marcos Juárez, en Córdoba, mostró esta semana el estado en el que quedó su campo después de las sucesivas visitas de "una luz" que lo siguió al menos cuatro veces hasta la entrada de su propiedad.
"Estoy a 3 kilómetros del puente de Saladillo, y ya es la cuarta vez que me está pasando que me voy de Monte Buey al campo a la 1 o las 3 de la mañana y me aparece una luz. La primera vez no le di tanta importancia. Me siguió hasta el campo", relató Leonardo Alfango al sitio LV16.com de Córdoba.
La escena es escalofriante. Como si fuera tomada de aquella serie X Files (Los expedientes secretos X) que protagonizaban los agentes Mulder y Scully de la división paranormal del FBI. La luz "se apagó" en la entrada del campo y Alfango decidió no contar la experiencia "porque hay gente que te cree y gente que no te cree".
"La segunda vez me bajo para abrir el portón y me aparece la luz cerca, como que me calentaba la cara, entonces no me animé a bajarme", relató. En vez, Alfango dio marcha atrás con su vehículo y manejó hasta lo de un vecino, a 2 kilómetros de su casa.
Cuando la luz desapareció el hombre decidió volver a su campo.
"Al día después aparecen cuatro ronchas quemadas que aparecieron frente a mi casa. Cada vez que aparece esa luz, aparecen las manchas. La tercera vez me ocurre el mismo caso: voy a abrir el portón y del portón a la chata aparece algo que me alumbra de frente", aseguró.
"La última vez, que fue hace 10 días, llego a mi casa, todo normal. Me meto en mi casa y siento un zumbido, un viento, no había tormenta, cuando salgo afuera veo esta luz que me brillaba", explicó el hombre en referencia a un video en el que se ve con claridad un punto luminoso en el cielo nocturo.
"Llevé la carabina y traté de filmar lo que pueda. Me fui arrimando entre el silo y el molino, y escuché una explosión y me asusté. A la mañana voy hasta el molino y había cuatro manchas", señaló Alfango, quien describió que las marcas "están a dos metros una de otra, en un cuadro, como que si se estacionaría alguien así y se quema".
El hombre también registró otras rarezas ocurridas en su campo, como la falta de agua en el tanque a pesar de que tiene suministro por red y no depende de su molino.