Todavía no se conoce el móvil del crimen. La Justicia trata de establecer el motivo por el que Patricia Yameta (42) fue apuñalada en su casa de Guatimozín el pasado viernes. Su marido, Claudio Alarcón (48), es el principal sospechoso. Momentos después del crimen de Patricia, Claudio también murió, tras chocar de frente y a alta velocidad contra un camión sobre la ruta 8 entre Arias y Maggiolo.
La autopsia del supuesto femicida reveló además un detalle que llamó la atención a los forenses sobre cómo terminó con su vida, luego que presuntamente ultimara a su pareja.
En la Justicia marcan que no hallaron denuncias de violencia previa ni antecedentes de maltrato entre ellos. Buscaron actuaciones en la comisaría de Guatimozín, en las unidades judiciales más cercanas, en reparticiones provinciales sobre violencia familiar, y todo dio negativo. Los testimonios relevados marcan que en 20 años de matrimonio, salvo algunos cruces verbales, no se supo de otros indicios que hicieran presumir este trágico desenlace.
El crimen está bajo investigación de la Fiscalía de Instrucción de Corral de Bustos, a cargo de Pedro Guerra. Allí se apunta que al menos tres testimonios tomados permiten despejar casi con certeza cualquier otra circunstancia en torno al hecho. Pero falta saber el motivo de tan violento episodio.
“Varios actos procesales son indicativos en el mismo sentido. Los testimonios son fundamentales en la investigación”, indicó a La Voz el fiscal. Según apuntó, falta cotejar prueba científica encargada a la causa.
Al igual que en la sede judicial, son muchas las preguntas que se hacen en las calles de Guatimozín, un pueblo de 2.500 habitantes del departamento Marcos Juárez, en el sudeste cordobés.
Otra investigación
Otra parte de la investigación tiene lugar en la provincia de Santa Fe. El deceso de Alarcón se produjo en ese territorio, a pocos kilómetros del límite interprovincial. La Fiscalía 3 de Venado Tuerto lleva adelante los peritajes por el choque. Se supo en un primer momento que dentro del vehículo en el que iba el hombre (una Peugeot Partner) se encontró un cuchillo de hoja ancha, con restos de sangre. Se supone (resta un peritaje) que fue el utilizado para matar a la mujer.
Pero el dato llamativo, que se descubrió al momento de la autopsia, es que el supuesto femicida tenía en su pecho clavado otro cuchillo. Según interpretan fuentes judiciales, aparentemente se lo incrustó explícitamente en el corazón al cruzarse de carril y chocar de frente contra el camión.
Los resultados de la autopsia y de otros peritajes en torno al vehículo son esperados en la sede judicial cordobesa para sumar elementos que esclarezcan el caso.
Otra prueba que esperan es la que pueda surgir de la inspección de los teléfonos celulares de la víctima y de su victimario. Se tramita la autorización para poder revisar los aparatos y establecer si los mensajes o llamados permiten cerrar los interrogantes en torno a los acontecimientos aún abiertos por este trágico hecho.
Fuente: La Voz del Interior