Un hombre de 40 años cuyas iniciales son MAH quedó en prisión preventiva en el marco de una investigación en la que está imputado como autor de los delitos de tentativa de homicidio en concurso real 12 hechos de lesiones leves cometidos en perjuicio de una niña de tres años en Santa Isabel (departamento General López). Así lo dispuso el juez de la Investigación Penal Preparatoria (IPP), Eduardo Bianchini, a raíz del pedido formulado por el fiscal Eduardo Lago.
La prisión preventiva impuesta al hombre investigado fue resuelta en una audiencia llevada a cabo ayer en los tribunales de Venado Tuerto, y en la que el juez, el fiscal, el defensor y el imputado estaban en distintos lugares e intervinieron de forma remota a través de la aplicación Zoom.
Escalada de violencia
“La tentativa de homicidio que investigamos fue cometida el domingo pasado en la casa que compartían el imputado, su pareja y la niña”, informó el fiscal Lago en la audiencia y agregó que “la menor es hija de la pareja del hombre investigado”.
El funcionario del MPA precisó que “minutos después de las 13:00, MAH intentó ahogar a la menor en un balde plástico de 20 litros de agua”. Lago relató que “los gritos y el llanto de la víctima fueron escuchados por un vecino, que ingresó a la casa en la que se estaba cometiendo el ilícito, logró rescatar a la menor y luego llevarla con su madre”.
“La tentativa de homicidio del domingo pasado no fue el primer episodio violento que sufrió la niña, sino que es el corolario de una escalada de violencia que viene dándose desde hace un tiempo”, sostuvo Lago en la audiencia. “De acuerdo a lo relevado hasta el momento, hubo al menos otros 12 hechos en los que el imputado golpeó reiteradamente a la niña. Estas agresiones ocurrían cuando la madre de la niña se iba de la vivienda”.
Audiencia remota
La audiencia realizada ayer en los tribunales de Venado Tuerto fue la primera en esa circunscripción judicial en la que todas las partes intervinieron de forma remota. El juez Bianchini lo hizo desde su despacho en los tribunales venadenses. Por su parte, el fiscal y el defensor también estaban en sus respectivas oficinas. En tanto, el imputado lo hizo desde la Alcaidía de Melincué y se evitó su traslado y la utilización de vehículos y agentes policiales afectados al control de la pandemia.